divendres, 22 de maig del 2015

I giorni

Dedicado con el amor poderoso e infinito que nace de la propia verdad, al mago de las preguntas: Ti ho perduto senza cattiveria, per trovare me stessa con bontà.

Fuente musical: I giorni - Ludovico Einaudi

hay días
en que mis antiguas palabras se me aparecen para asustarme
y a la tierra
que se estremece
haciendo que el pasado sobresalga entre las piedras
y el presente y yo nos agarremos tropezando.
son días de encrucijadas
de preguntas que no se están quietas
y se desdoblan, borrosas en la niebla
cuando intentas apartarlas.
hay días
que llevan consigo la marca de la ruina
y transforman mis miedos en angustia
mi fortaleza en locura
y desespero

hay días que me miro y me sostengo
acaricio mi pelaje y mis fauces de loba luchadora
me veo tan cansada, y a un tiempo
tan bella en el misterio que sostiene tanta fuerza

otros días soy un baile
mi alegría me da vueltas y me juega el pelo
días de acariciarle el alma a las cosas
de vestido,
de sacar todos esos besos que hace tanto tiempo que no nos ponemos

hay días de silencio... que soy coraza, soy destino y un dolor tan transparente!

hay días de mundo, y yo sólo observo
suspendiendo mis piernitas en una nube
veo
a los vientos y los océanos desfilando
hacia las tierras y los bosques con los que se reúnen y se cuentan
y deciden y destruyen y recrean
y yo.. sólo soy un puntito entre palabras que se adormece

días que se pegan a las suelas y cuesta desengancharlos
que se caminan lenta y pesadamente
y parecen elásticos e interminables

hay días sin cerebro,
que se meten dentro nuestro y nos cuentan el gran misterio
y entonces
salimos desnudos a la terraza a gritarle al mundo,
días que abrazo fuertemente en mi corazón
porque en verdad son días puros
y se resisten a la esclavitud de nuestras mentes

hay días grises, y a veces huelen a lluvia y café
y se mordisquean poco a poco acurrucada tras la ventana

ci sono giorni in cui penso a te
e la tua assenza ed io scommettiamo sul tuo ritorno
sono giorni
in cui la notte viene sospesa e intrigante
e la mia comparsa
son i bellissimi fiori che un giorno d'inverno
ti ho portato per dirti addio

KPV Maig/2015

diumenge, 10 de maig del 2015

10 elevat a -43 segons

Lliures,
electrons i ions positius
kelvin a 23 elevacions de l'energia del punt zero

tan poc de temps..... i ja es plasma, l'amor.

dijous, 7 de maig del 2015

Fuera en el jardín donde plantamos nuestros océanos particulares
se levantan los talones de nuestras carreras,
locas de altos vuelos
y ahora que los tallos ya dieron su máximo
y mis pies pisan sólo hierbas secas
me pregunto si valió la pena
tanto esfuerzo
por ti y por mi
por todo el dolor que tuvimos que pintar sobre nuestras manos
para vivir la vida que ... no sé... no sé si fue, la que vivimos,
la misma que soñamos.

KPV Maig/2015

diumenge, 3 de maig del 2015

Construía sillas

Construía sillas.
Las moldeaba con el suave ahínco de las manos automáticas.
Retorciendo las ramas adormecidas en el sotobosque.
Algunas gritaban. Me chillaban que las devolviera.
A su lugar, al palpito acompasado de sus existencias entrelazadas
a la tierra, los líquenes, las diminutas patas que las recorrían,
que las amaban.
Había sido cruel en mi indiscreta elección.
Hasta que entendí.
Hasta que pregunté antes de tomar.
Hasta que supe escuchar y ver en las voluntades de cada expresión del tiempo,
la misma importancia.

Construía sillas, y quedaban en el exterior mirando hacía la espesura.
Algunas me dejaban sentar. Las de madera recogida en el margen de lo oscuro.
Con menor tolerancia a lo desconocido y entonces, una imaginación más vívida.
Les gustaba explicarme viejas historias llenas de gruñidos y huellas en el follaje.
De sendas que florecen y se ocultan, y que llenan el espacio de un vacío irrespirable.
Agradecían el calor de mi cuerpo y mi canturreo tan poco sobrenatural mientras trabajaba.

Algunas mañanas al salir de la cabaña, las sillas habían huido.
Podía reseguir la senda errática de su dispersión
como cárcavas llenas de los lamentos indispensables para parir los temores,
que así como se alejaban, se mudaban en brincos de júbilo:
puntadas en la tierra de una costura para agrandar sus mapas.
Más adelante, vislumbré alguna a lo lejos,
con un crepitar de gruñidos y juegos sobre el boscaje,
ganándose una leyenda de espíritu tenebroso...


Convencidos de que eran sustraídas por las noches,
en el pueblo me aconsejaban que encerrara las sillas.
Les molestaba mi falta de afán posesivo...  inquietos quizás por sus pertenencias.
Entre sonrisas, yo me imaginaba a las cacerolas, a los granos de sal bajo vigilancia,
a las gotas de lluvia y a las abejas con una soga al cuello,
el agua entre rejas y el polvo sobre mis libros encadenado,
a mis palabras y a las arañas del techo con la imaginación inmovilizada,
al olor del tomillo y el jazmín maniatados espalda contra espalda.
Y en una noche de luna sobre el claro,
mientras custodiara diligentemente todo eso que había obligado a ser mío,
con las sillas subyugadas en forma de aquelarre
observando mi reino de voluntades esclavas,
alguien vendría a sentarse sobre mí sin pedirme permiso.
Desoyendo mis chillidos.


Construía sillas.
Para ganar un nombre nuevo penetrando el excitante misterio de lo ignoto.
No para construir ejércitos que me protegieran de él.

KPV Maig/2015





divendres, 1 de maig del 2015

luz

Sobretodo somos luz
Y la luz siempre comprende
Y lo que comprende lo ama
porque es parte de ella misma.