dimecres, 25 de juliol del 2012

Cruzando el océano

La orilla no me detendrá.
Podría construir un puente de compulsiones
y contar con cada anhelo, un paso,
y así, tras millones de segundos
atravesar el océano.
Todo el mundo no será bastante.
No hay suficiente lejos.
Tengo un hilo de araña atado a tu cuerpo.
Emerge del mío, bien dentro.
Traté de cortarlo, morderlo.
Pero se resiste.
Cuanto más tiro hacia atrás, más aprieta.
Es mi trampa: ahorcada con tu recuerdo, casada con tu deseo.

Por eso ahora me hallo en la orilla.
Mirando hacia el camino azulado, infinito,
que seguiré para encontrarte.
Para pedirte que sueltes el otro extremo
o que lo agarres fuerte.
Ya tanto da.
Cualquier cosa mejor que arrastrar
este cabo flojo,
que se me enreda en los sueños,
que ahoga mi vida,
los buenos momentos que tan mal recuerdo.

Si muero,
si me ahogo mientras tanto,
cruzando este océano
para liberarme o tenerte,
no temas, no llores, descuida
sostendré los vastos océanos con mis manos
con mi corazón, en palpitación eterna, generando oleajes. 

KPV Juliol/2012